una sociedad clientelar

A partir de una entrevista que le realizaran a Marina Garces hace dos semanas atrás, en la que menciona los efectos de una sociedad clientelar y sus peligros; creo oportuno tratar de dar una interpretación a sus palabras, en función de como se muestra la sociedad venezolana de hoy día.

y dice Marina Garces

y la interpreto como que nuestra sociedad ha vivido una transformación que en lugar de hacerla evolucionar, pareciera que involuciona al perder facultades y saberes y conocimiento, cuando deja en manos de terceros lo que antes fue su iniciativa, su modo de vida su supervivencia ante el entorno: educar a los hijos se vuelve una tarea muy complicada y absorbente y por ello decidimos salir a trabajar para poder pagar la educación que les permita encajar en la sociedad que estamos construyendo.

nos volvemos clientes de ese colegio que educa a nuestros hijos. Pero le imparte la educación que esperamos o la que deseamos?

Igual pasa con la seguridad en nuestras comunidades y como no nos sentimos totalmente seguros, asumimos ser clientes de una empresa que nos provee uno o dos cuidadores por turnos y aun cuando este personal y esta empresa solo estén allí para subir y bajar la barrera que permite el paso de vehículos, ya nos sentimos mas seguros y podemos respirar y dormir tranquilos. eso si! debemos trabajar aun mas para poder pagar este nuevo servicio del cual nos convertimos en clientes

Cree Ud que hasta alli llega todo?  como ser clientes del supermercado del que ya no somos capaces de prescindir pues ya perdimos el conocimiento para  producir nuestra comida en nuestros patios o cocinas  y asi, lo compramos todo hecho!. Por supuesto que no nos escapamos de trabajar mas para poder tener acceso a estos bienes y servicios que nos ofrece el mercado

y cual si fuese otro producto mas que podemos adquirir de una vitrina, no podria faltar el poder que le transferimos a los políticos para que nos faciliten la vida haciendo leyes que se ajusten a nuestro modo de vida y ofreciéndonos villas y castillas para nuestra comodidad a cambio de unos votos y es aquí donde se nos convierte en una maraña lo que queremos y lo que podemos tener  pues no hay políticos que cumplan al 100% con lo que nosotros como clientes deseamos 

Quien lo diría!

Una Sociedad clientelar, exigiendo a sus políticos, en diferentes grados de insatisfacción por lo prometido e incumplido: calles limpias, el puente, menos horas de trabajo, mayor seguridad social, la Internet o simplemente agua potable

Obvio que no todas las cosas que nos prometen los políticos nosotros podríamos asumirlas  y  nos resultaría prácticamente imposible el acometer alguna mediana obra de infraestructura; no por que no sepamos como hacerla, sino por que es tal nuestro nivel de acostumbramiento a esa forma de actuar como clientes, que hemos olvidado como organizarnos en nuestra comunidad, ya que hasta ahora, todos nuestros problemas podían  resolverse a partir de nuestro poder de compra y por eso desdeñamos la posibilidad que nos ofrece la participación en un Consejo Comunal o una Comuna  o para hacerlo mas sencillo, en la junta de condominio de nuestro edificio

Lease como poder de compra, también al voto. ya que el voto por si solo es un instrumento de pago para los políticos. Lamentablemente nuestras sociedades no han logrado evolucionar esta forma de prepago en la política y es por ello que cuando nos referimos a ellos, los políticos, casi siempre lo hacemos desde la insatisfacción de haber pagado con votos, por un servicio que no recibimos en las condiciones en las que nos fue ofrecido originalmente

Este tema da para mucho y podríamos desarrollar bastante que decir en cualquiera de sus enfoques, pero bien productivo seria si cada uno de nosotros, en nuestras comunidades pudiéramos dar rienda suelta al debate de como pasar de ser un cliente que se queja y se queja de sus políticos y empezamos a ser ciudadanos con derechos, con deberes, con exigencias y con ofrecimientos para mejorar nuestra calidad de vida en colectivo , haciendo mas por nosotros mismos. Pues como dice la propia Marina Garces: Tenemos que volver a pensar que lo público somos nosotros. Y por lo tanto, aquello que consideramos que es parte de nuestra vida en común no son productos que nos ofrece el Estado sino nuestras propias conquistas. Nuestros  bienes comunes.

notas:

El clientelismo político es un intercambio extraoficial de favores, en el cual los titulares de cargos políticos regulan la concesión de prestaciones, obtenidas a través de su función pública o de contactos relacionados con ella, a cambio de apoyo electoral. (Tomado de Wikipedia)

Hay gente que relaciona con sus matices de gris, el clientelismo con la corrupción... sera por eso que si un servicio publico falla, hay gente que con su capacidad de pago decide aceptar las condiciones de esa corrupción para que le repongan su servicio, sin importarle que su formato de ciudadano se pierda cada vez que aplica la ventaja que le impone al resto,  como cliente con facilidad de pago; aun si la sociedad a la que pertenece, sale perdiendo con su actitud individualista. ...

como para pensarlo: será que somos parte activa de la corrupción que detestamos en otros ...pero validamos en nosotros por nuestra condición de clientes con poder de compra?